Los Estados Unidos: El nuevo epicentro del Coronavirus

Los Estados Unidos está sufriendo probablemente la caída más grande en décadas. El país es ahora el nuevo epicentro del COVID-19.

Dadas las circunstancias, todas las áreas gubernamentales están tomando decisiones apresuradas para prevenir más contagio masivo.

Las entidades migratorias también están siendo afectadas negativamente y la comunidad de inmigrantes está en alto riesgo en medio del caos por el que estamos pasando.

Es bien sabido que los centros de detención de inmigrantes no cuentan con los requerimientos necesarios para ofrecer higiene y espacio suficiente a las familias que se encuentran allí.

Por ende, las medidas que se están tomando son extremas y pueden ser perjudiciales sobre todo para los países de Centro América.

¿Cuáles decisiones han tomado para los inmigrantes?

• El gobierno decidió detener completamente el ingreso de inmigrantes al país (temporalmente). Por ende, cualquier persona que esté llegando a las fronteras en este momento a pedir asilo, debe ser devuelto inmediatamente incluso antes de entrar al territorio norteamericano.
  Esta medida extrema no exime menores de edad. Ellos también son devueltos así vengan solos.
• La deportación es un procesos que no se detuvo a pesar del Coronavirus, de hecho, pareciera que estuvieran acelerando las deportaciones.
• Las oficinas del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) no tienen servicio para citas presenciales al menos hasta mayo del 2020.
• USCIS está aceptando todas las aplicaciones en línea.

La deportación en medio de una pandemia

El gobierno actual siempre ha pensado que la inmigración es algo negativo para el país, por ende, las políticas migratorias son bastante estrictas en este momento.

Actualmente, con el brote del Coronavirus, no hay ningún impedimento para deportar a los inmigrantes que quiere pedir asilo o refugio en el país.

Las deportaciones están siendo tan rápidas que no alcanza el tiempo para notarlo en medio de las circunstancias precarias de salud pública.

Esto es un riesgo tremendo para los países de Centro América ya que la propagación del virus puede ser mayor si deportan a personas que tal vez están contagiadas.

Uno de los aviones de deportación que fue enviado la semana pasada a Guatemala con aproximadamente 40 inmigrantes tenía un pasajero que testeó positivo en el examen del COVID-19.

Eso quiere decir que un inmigrante infectado estuvo en contacto con otras personas en un avión por un tiempo considerable.

Centro América alza su voz

Varios países han presentado sus quejas con respecto a la cantidad de deportaciones que se hacen diariamente desde los Estados Unidos hasta Centro América.

Ellos mencionan que ya no hay procesos ni regulaciones, que ellos solo están deportando la mayor cantidad de personas que puedan debido a la crisis que enfrentan, pero también aseguran que eso no es justo ni seguro para el resto del continente.

De hecho, Meg Galas, la directora de una de las áreas del Comité Internacional de Rescate dijo: «Los deportados llegan todos los días, arriesgándose a una mayor propagación de la infección por COVID-19 en Centroamérica y agotando los recursos limitados de los gobiernos centroamericanos que están preparando los sistemas de salud para atender a una población ya vulnerable.»

Otra de las acusaciones presentadas recientemente es que pareciera que los Estados Unidos tuviera la intención de deportar a los inmigrantes que estén infectados con COVID-19.

Esto es una conjetura muy delicada porque aún no hay pruebas para asegurar eso. Sin embargo, si ese es el caso, todo Centro América y Sur América estaría en un peligro inminente.

Las decisiones de los países afectados

Centro América ha tomado decisiones extremas con respecto a su relación con los Estados Unidos también.

Por ejemplo, México ha cerrado todas las fronteras, impidiendo el ingreso de cualquier persona proveniente de los Estados Unidos.

Es un poco irónico como el gobierno de Trump quería crear un muro fronterizo con México para evitar la inmigración ilegal. Ahora, es México el país que evita a toda costa el ingreso de población estadounidense.

Los países de Centro América están haciendo todo lo posible para detener las deportaciones para evitar un contagio masivo dentro de sus territorios.

La decisión más inteligente es seguir los procesos de inmigración de la mano de personal capacitado para que el resultado sea exitoso.

Evitemos a toda costa la inmigración ilegal y cuidemos a nuestras familias de las circunstancias actuales que miles de inmigrantes están viviendo en el mundo. Siempre hay una manera de hacer los procesos de manera segura.

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