Las deportaciones expresas durante la pandemia

A la luz de la amenaza a la salud pública provocada por la pandemia del Coronavirus, la administración actual de los Estados Unidos decidió ejecutar planes de acción para prevenir el esparcimiento incontrolable del virus.

Una de estas medidas de emergencia fue cerrar las fronteras y prohibir temporalmente el ingreso de solicitantes de asilo y refugio.

Normalmente, cuando los inmigrantes llegan a las fronteras a solicitar asilo o intentan cruzarlas ilegalmente y son detenidos, deben permanecer en México o son llevados a centros de detención alrededor de los Estados Unidos.

Sin embargo, debido a que uno de los detonantes para un brote masivo de Coronavirus es la sobrepoblación, el gobierno de Trump decidió omitir las regulaciones de la inmigración durante la crisis sanitaria global y así evitar que los centros de detención de inmigrantes se sobrepoblen incluso más.

Por ende, actualmente se hacen deportaciones expresas, lo cual significa que cada vez que un inmigrante es capturado intentando cruzar las fronteras ilegalmente es deportado casi inmediatamente, sin protocolos ni chance de apelar la decisión.

Los inmigrantes deportados son llevados normalmente a países de Centroamérica como México, Honduras, El Salvador, Guatemala, entre otros.

Si necesita ayuda con un caso de deportación, nosotros podemos ayudarlo.

Los argumentos del gobierno de Trump

La administración actual de los Estados Unidos asegura que las deportaciones expresas ayudan a:

• Prevenir un brote masivo de Coronavirus dentro de las instalaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).
  Sin embargo, las cifras oficiales muestran que los centros de detención de inmigrantes ya están atestados de casos positivos de Coronavirus.
• Proteger a los empleados de ICE y a las comunidades de inmigrantes.
• Evitar que más inmigrantes entren al país y se sature el sistema de salud.

Los riesgos que enfrenta Centroamérica actualmente

Últimamente, se ha desatado una polémica incesante debido a los procesos de las deportaciones durante la coyuntura actual.

El debate reside principalmente en que Centroamérica no está preparado, tanto económica, social ni políticamente, para mitigar el impacto de la pandemia global de Coronavirus.

Varios críticos, defensores de los derechos de los inmigrantes y gobiernos de países centroamericanos argumentan que:

• La infraestructura del sector médico de los países centroamericanos no tiene suficiente solidez para contrarrestar el efecto del COVID-19.
• Los recursos locales son limitados y alcanzan solamente para proteger a la población local.
  Con la llegada de tantos inmigrantes deportados desde los Estados Unidos, hay una posibilidad muy grande de que el sistema de salud se debilite y sature.
• Hay cientos de casos confirmados de Coronavirus entre los inmigrantes deportados desde los Estados Unidos a territorio centroamericano.
  Esto representa una amenaza gigante para estos países tercermundistas ya que están recibiendo casos importados del virus mientras intentan proteger a la población local.
• Múltiples críticos alrededor del país aseguran que el gobierno de Trump está utilizando la pandemia como una excusa para cumplir su meta de reducir la inmigración en los Estados Unidos.

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La mejor solución

Recientemente se han presentado varias peticiones y demandas judiciales pidiendo al gobierno de Trump la suspensión de las deportaciones expresas.

Debido a que la amenaza a la salud pública ya está disminuyendo, las regulaciones de las deportaciones deben volver a retomarse de manera normal.

Es el momento adecuado para presentar su caso de inmigración teniendo suficiente cautela para evitar una posible deportación.

Si tiene alguna pregunta sobre un problema de inmigración o sobre un caso que pueda tener actualmente en progreso, no dude en comunicarse con nosotros para una Consulta Telefónica GRATUITA con uno de nuestros abogados expertos en inmigración.

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