Estados Unidos Continúa Exportando el COVID-19 a Guatemala
Las deportaciones son comunes en medio de la pandemia global
Desde la llegada del Coronavirus a los Estados Unidos, el gobierno de Trump ha anunciado varios cambios en las políticas de deportación.
De hecho, las deportaciones expresas, eximidas de protocolos establecidos por la ley, son aceptadas durante la crisis sanitaria provocada por el COVID-19.
El gobierno de Trump expone varias teorías acerca de los beneficios de las deportaciones expresas durante la pandemia.
Algunos de los argumentos principales de por qué las deportaciones expresas son necesarias son:
- Previenen una posible saturación en el sistema y los procesos de inmigración.
- Previenen que los Centros de Detención de Inmigrantes alrededor del país se sobrepoblen.
- Evitan que miles de inmigrantes entren a los Estados Unidos y utilicen recursos sustanciales necesarios para superar la crisis sanitaria.
- Previenen que el sistema de salud se debilite y se sature innecesariamente.
- Evitan que los inmigrantes utilicen beneficios sociales que deben ser ofrecidos solo a la población local durante la coyuntura actual.
Por ende, la administración actual de los Estados Unidos apoya las deportaciones expresas en medio de la crisis sanitaria provocada por el Coronavirus.
Esto ha generado un debate incesante entre el gobierno de Trump y organizaciones de defensores de los derechos de los inmigrantes.
Las deportaciones expresas a Guatemala
Guatemala es uno de los países centroamericanos que recibe una gran cantidad de los inmigrantes deportados desde los Estados Unidos.
Durante la crisis sanitaria, Guatemala ha sufrido las consecuencias de la importación del virus a través de los vuelos de deportados provenientes de los Estados Unidos.
De hecho, el gobierno Guatemalteco solicitó al gobierno de Trump suspender las deportaciones por más de un mes y se retomaron con normalidad el 9 de junio del 2020.
Una de las condiciones para retomar las deportaciones hacia Guatemala era que Estados Unidos debía enviar los certificados médicos de cada uno de los inmigrantes deportados, demostrando que no están infectados de Coronavirus.
Sin embargo, solo han pasado 15 días desde que se retomaron las deportaciones y ya hay más de 20 inmigrantes deportados desde los Estados Unidos que testearon positivo en la prueba de Coronavirus.
Esto quiere decir que el gobierno de Trump está rompiendo la promesa de implementar protocolos de salud antes de deportar inmigrantes hacia Guatemala.
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La gravedad de las deportaciones expresas
Hay múltiples motivos por los que Guatemala pidió al gobierno de los Estados Unidos que se ajustaran los protocolos de deportación.
Por ejemplo:
- La infraestructura del sector médico no está preparado para salvar la mayor cantidad de vidas posible en caso de un brote masivo de Coronavirus.
- Guatemala no tiene suficiente personal médico.
- Los recursos locales del país centroamericano son limitados y deben usarse cautelosamente.
- No hay suficientes implementos médicos para proteger a los inmigrantes deportados.
Por ende, el gobierno de los Estados Unidos debe analizar la situación antes de seguir deportando desmesuradamente ya que podría generar resultados diametralmente opuestos a los que espera.
Por ejemplo, una de las repercusiones que esto podría causar es que cuando la situación mejore en los Estados Unidos pero empeore en Guatemala, la migración masiva va a ser un altercado para el territorio norteamericano.
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