El TPS está en la cuerda floja

Según la página oficial del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USICS, por sus siglas en inglés), los inmigrantes provenientes de países que atraviesan conflicto armado, desastres naturales, guerras civiles, epidemias y otras circunstancias adversas, tienen la posibilidad de pedir protección internacional a través de un programa humanitario llamado Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés).

Normalmente, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), tiene la responsabilidad de determinar cuáles son los países beneficiarios del TPS y cuál será la vigencia del permiso. Actualmente, hay 10 países amparados por el TPS.

Es importante entender que la administración actual de los Estados Unidos, con el presidente Donald Trump liderando, tiene una percepción negativa con respecto a los programas humanitarios del sistema migratorio actual. El gobierno de Trump argumenta que el país debe sustituir algunos de los beneficios actuales y reemplazarlos por un sistema de inmigración basado en el mérito.

Esa es la razón por la que su gobierno ha intentado remover programas como TPS y la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) en múltiples ocasiones, así como ha reducido substancialmente la cantidad de refugiados y solicitantes de asilo permitidos anualmente en los Estados Unidos, negándoles la oportunidad de pedir protección internacional.

La controversia alrededor del TPS fue tan grande que llegó a la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, que falló a favor del gobierno de Trump y a mediados de septiembre permitió la cancelación del TPS.

Sin embargo, la administración actual no ha presentado su decisión al público y varios de los países beneficiarios del TPS tienen protección contra la deportación hasta enero del 2021.

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Beneficiarios de TPS están en el limbo

Según las cifras oficiales, actualmente hay aproximadamente 411,000 inmigrantes protegidos por el TPS, quienes han residido en el país por un periodo de tiempo considerable, algunos de ellos por más de 20 años, lo cual hace peligroso el retorno a un país que es casi desconocido para ellos.

Ellos han construido una vida en los Estados Unidos, tienen familias y aportan grandemente al desarrollo socioeconómico local a través de sus trabajos e impuestos.

Testimonios de cientos de beneficiarios del TPS muestran que la angustia y la desesperanza está presente durante esta época de crisis ya que no saben cuál va a ser la decisión del gobierno de Trump ahora que tiene la posibilidad de remover este beneficio migratorio y, en su opinión, pareciera que está esperando hasta el último momento para presentar su decisión, sin darles tiempo ni posibilidad de apelar sus casos y elegir otro proceso de inmigración.

Por ejemplo, en Florida hay más de 56.000 portadores de TPS, quienes declaran que no saben cuál será el destino que tendrán que enfrentar si son deportados o si la administración de Trump remueve este programa humanitario que les ha permitido vivir en armonía y construir un futuro prometedor para sus seres amados.

Aproveche correctamente su tiempo, busque ayuda fidedigna

Es imperativo que busque ayuda fidedigna de expertos a la hora de iniciar un proceso de inmigración, principalmente porque hay múltiples opciones que pueden acomodarse a sus necesidades y es esencial elegir el correcto para evitar un posible rechazo por parte del USCIS.

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