La fuerte insistencia del gobierno de Trump por construir el muro fronterizo

Uno de los aspectos más llamativos de la campaña del presidente Trump ha sido su ideal inamovible de construir un muro fronterizo entre los Estados Unidos y México para evitar la inmigración ilegal desde Centroamérica.

Durante las últimas elecciones presidenciales, Donald Trump aclaró que pensaba terminar de construir el muro completo durante su presidencia.

Hoy en día, nos acercamos a las elecciones presidenciales que tendrán lugar en noviembre del 2020 y la promesa de construir el muro aún no ha sido cumplida.

Los impedimentos para la construcción del muro

Durante los últimos años, el gobierno de Trump se ha enfrentado a varias críticas por intentar desviar fondos destinados a la protección social, pensiones o fuerzas fronterizas para la construcción del muro entre México y los Estados Unidos.

Esto quiere decir que una gran parte de los impuestos pagados por los ciudadanos anualmente están dirigidos a la construcción del muro que separa estos dos países.

Además de eso, el proyecto de Trump ha tenido que detener la construcción por las protestas de los ambientalistas y activistas que reclaman que:

• La inmigración ilegal se incrementa debido a las regulaciones estrictas de la administración actual de los Estados Unidos.
• El muro afecta a la vida salvaje de los desiertos, mares y selvas de las fronteras.
• Miles de animales han sido encontrados sin vida debido a la invasión de su territorio.
• Los inmigrantes merecen una oportunidad para presentar sus solicitudes de residencia en los Estados Unidos sin necesidad de ser privados de la posibilidad de entrar al país.

A pesar de las críticas que recibe el gobierno, el presidente Trump continúa con la intención de terminar el muro antes de las elecciones venideras.

El presidente continúa construyendo el muro a pesar del riesgo de la pandemia

La situación se tornó muy alarmante recientemente ya que la administración actual de los Estados Unidos ha tomado ventaja de la pandemia y el confinamiento para continuar con la construcción del muro fronterizo.

Es bien sabido que muchos de los sitios donde debe construirse el muro son propiedad privada de ciudadanos que residen allí y para que el gobierno pueda construir en esos territorios debe obtener el permiso o comprar la propiedad privada y convertirla en propiedad federal.

De acuerdo al director legal del Programa de Justicia Racial y Económica para el Proyecto de Derechos Civiles de Texas, el gobierno de Trump ha intentado apropiarse de 24 propiedades privadas en Texas desde marzo del 2020.

Este número es mayor a la cantidad de propiedades privadas que el gobierno intentó adquirir durante los últimos ocho meses.

Eso es una preocupación gigante para las comunidades de activistas y defensores de los derechos de los inmigrantes que reclaman que la administración actual de los Estados Unidos está utilizando la crisis sanitaria para cumplir su agenda de inmigración que tiene prevista desde el 2017 cuando el presidente Trump asumió el cargo.

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